Marta Julia Ramírez: “Si ya he caminado sola, ahora con un seguro voy a caminar a la par de una esperanza”

Marta Julia Ramírez. Fotografía FLM/SM CA/ Zoraya Urbina
#ElSalvador

#AvanzamosConEsperanzaCentroamérica

 
Marta Julia es parte del proyecto “Microseguros y Resiliencia Climática” que, gracias al apoyo solidario de Canadian Lutheran World Relief y Canadian Foodgrains Bank, ejecuta el Programa Centroamérica, de la Federación Luterana Mundial/Servicio Mundial (FLM/SM CA).
 
 
Marta Julia Ramírez Jovel, 49 años, es una mujer trabajadora que con esfuerzo y dedicación ha mantenido a su familia.

Originaria de hacienda Escuintla, cantón Tierra Blanca, caserío La Florida, departamento de La Paz, tuvo que migrar junto a sus progenitores por la guerra civil del país. Ella y su familia huyeron a San Miguel, (departamento de la zona oriental salvadoreña) y hace 40 años, regresaron a la zona.

 Ahí conoció a su esposo, con quien procreó cuatro hijas y dos hijos, quienes la hicieron abuela de tres nietos. Desde pequeña, se ganó la vida con la venta de hojas de plátano, emprendimiento que aún realiza. “Mis $25 dólares hago, aunque casi no hay hojas para cortar, también tengo este molino, que cuando me va bien hago mis $4 o $5 dólares diarios”, comenta al referirse a un molino de maíz con el que ofrece sus servicios a sus vecinos, y muele la masa para las tortillas que consumen ella y su familia. Esta la manera en que obtiene sus ingresos desde que quedó viuda hace un par de años.

“Con un poquito de hojas de plátano que uno va a vender se trae el café, tomates, azúcar, una “librita” de frijoles. No estoy abastecida pero mi “bocadito” de frijoles, ese sí lo tengo”, afirma.

Marta Julia es una de las personas que han sido parte del proyecto “Microseguros y Resiliencia Climática” que, gracias al apoyo solidario de Canadian Lutheran World Relief y Canadian Foodgrains Bank, ejecuta el Programa Centroamérica, de la Federación Luterana Mundial/Servicio Mundial (FLM/SM CA).

El objetivo principal de esta iniciativa es fortalecer la resiliencia de los pequeños productores de granos básicos a través de un micro seguro para responder ante los daños que puede ocasionar el cambio climático en los cultivos.

“El micro seguro paramétrico es un seguro agrícola con requisitos y coberturas más pequeñas que las de un seguro tradicional y se activa automáticamente cuando los parámetros de exceso o falta de lluvia o movimientos sísmicos que se registren en algún territorio hayan afectado los cultivos”, explica Carlos Huezo, técnico del proyecto.

 Para hacer estas mediciones, se usa información satelital que el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales controla de forma permanente. Es así que la FLM estableció un convenio con el Banco de Fomento Agropecuario (BFA), una entidad bancaria estatal, para la implementación del proyecto piloto de micro seguros, que apoya a pequeños productores de granos básicos de los municipios del Corredor Seco que tramitan créditos menores a los $3,000, para el plazo de un año, específicamente en los departamentos de La paz y Usulután, de acuerdo a Mercy Palacios, quien coordina el proyecto.

La esperanza acompaña

Además de sus emprendimientos, Marta Julia es propietaria de una manzana de terreno donde siembra maíz. Por eso para ella, el proyecto de seguros paramétricos es una ayuda importante porque ya ha tenido malas experiencias: “Una vez me fue mal, sembré dos veces y con los créditos”, recuerda. Entonces, tuvo que prestar dinero para pagar a tiempo en el banco, y evitar que el retraso le generara intereses en las cuotas.

La cosecha de maíz le sirve para el consumo familiar, para alimentar sus animales de granja. Con esta producción, evita comprar en el mercado el maíz tan necesario para la dieta básica de las y los salvadoreños pues con este se elaboran las tortillas, entre otros platos. Por eso el proyecto la ilusiona, porque si hay pérdida de cultivos, le evitará que le deba al banco y pierda el dinero invertido: “Este seguro me va a garantizar que no me vuelva a pasar. Si ya he caminado sola, ahora con un seguro voy a caminar a la par de una esperanza”, recalca.

 

Unidad de Incidencia y Comunicaciones FLM/SM CA

Fotografías: FLM/SM CA/Zoraya Urbina