Fue una de las dos primeras mujeres ordenadas como pastoras en el Sínodo Luterano Salvadoreño (SLS), ordenada el 20 de septiembre de 1986. Doña Abelina Centeno de Gómez dejó su natal México cuando se casó. Desde que llegó a El Salvador se comprometió a dar su tiempo y esfuerzo para el SLS, a través de su trabajo con niñas y niños.
Como madre de seis hijos, la responsabilidad del pastorado no representa un problema, sino que la motiva a dar lo mejor de ella misma porque "el contacto que permite el ministerio es un calor humano que no se puede comparar con nada, me realizo en el servicio a la comunidad. Los niños son mi vida", enfatiza. Actualmentes es la pastora de la iglesia Fe y Esperanza, que durante la guerra civil salvadoreña sirvió de refugio para quienes huían de la violencia provocada por el conflicto armado.
Doña Abelina es la esposa del Obispo Medardo Gómez, la cabeza de la iglesia luterana en El Salvador. Para ella, acompañarlo y respaldar su labor es una decisión y una respuesta al llamado de Dios para el servicio, pero también para contribuir a que el liderazgo de la mujer en la iglesia crezca para lograr iglesias inclusivas.